¿Has estudiado en otras escuelas y sigues sin hablar inglés?

 Si tu respuesta es afirmativa, te invitamos a responder las siguientes preguntas.

  1. ¿Estuviste estudiando inglés en grupos reducidos (menos de 15 alumnos)?
  2. ¿Te brindaron atención personalizada de acuerdo a tus fortalezas y debilidades?
  3. ¿Siempre tuviste clases 100% en inglés?
  4. ¿Tus profesores se enfocaban en corregir tu pronunciación?
  5. ¿Tus profesores se ocupaban del progreso y desarrollo de tus habilidades de comprensión (lecturas y audios), así como de tu producción oral y escrita y te daban retroalimentación de cada una de ellas?
  6. ¿Te podías comunicar en inglés tanto de manera oral como de manera escrita de acuerdo al nivel en el que estabas?
  7. ¿Tenías la certeza de que tus profesores dominaban el idioma?
  8. ¿En tus clases tuviste la oportunidad de que tus profesores incluyeran lecturas adecuadas a tu nivel y te permitieran elegir entre algunos títulos de acuerdo a tus gustos?
  9. ¿Tus clases siempre iniciaban en punto de la hora programada?
  10. ¿Tu escuela contaba con tecnología multimedia en cada una de sus aulas para proyectar los contenidos a desarrollar y así optimizar tiempo y hacer la clase más dinámica?

Si respondiste “NO” a la mayoría de las preguntas, te invitamos a conocer nuestro sistema en donde encontrarás una manera distinta de aprender inglés.

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